Comisión Europea pone fin a la exención del cumplimiento antimonopolio para navieras

Journal of Commerce

La Comisión Europea ha decidido, tras un análisis del mercado marítimo internacional, no prolongar la regulación legal de la ‘block exemption’ (exención en bloque) que supone la exención para las grandes navieras del cumplimiento de la normativa europea antimonopolio.

Adoptado por primera vez en 2009, el Reglamento de Exención por Bloques para Consorcios (Consortia Block Exemption Regulation – CBER por sus siglas en inglés) permite a los operadores de transporte marítimo de línea con una participación de mercado combinada inferior al 30% unirse para proporcionar servicios conjuntos de transporte de carga, siempre que no fijen precios ni compartan mercados entre ellos.

El colegio de comisarios entiende que esta polémica norma no sirve a su propósito de favorecer la competitividad en el sector, lo que supone de facto que dejará de aplicarse el próximo 25 de abril de 2024, después de culminar un proceso de revisión iniciado en agosto de 2022, destinado a recopilar pruebas sobre el funcionamiento de la exención desde 2020, con vistas a su expiración el 25 de abril de 2024.

Esta exención viene permitiendo a las navieras celebrar, bajo ciertas condiciones, acuerdos de cooperación para prestar servicios conjuntos de transporte de carga, los conocidos como consorcios o alianzas que han venido proliferando en los últimos años. (VSA – vessel share agreements).

Sin embargo, el final de esta exención no significa que la cooperación entre líneas navieras pase a ser ilegal según las normas antimonopolio de la Unión Europea, aunque deberán cumplirse una serie de requisitos tasados para que puedan mantenerse.

Esta exención ha contribuido decisivamente a modificar el panorama del mercado europeo de transporte marítimo que ha pasado de ser un sector muy atomizado en 2009 a vivir un proceso de integración que ha dado lugar a integraciones verticales y a colaboraciones a través de alianzas.

Sin embargo, a la luz del estudio elaborado por la Comisión Europea, la necesidad de evolucionar hacia cadenas de suministro más resilientes y diversificadas hace que la normativa pierda su razón de ser.

Este cambio regulatorio en el mercado del transporte marítimo se produce en un momento en el que la capacidad de la flota excede a la demanda y que está aumentando progresivamente con entregas de gran capacidad éste año (buques de 25.000 TEU) y más entregas esperadas en 2024 y 2025.

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